El ritmo vertiginoso de la evolución tecnológica hace que consideremos los diferentes dispositivos y materiales audiovisuales como un elemento más de nuestra rutina, sin pararnos a pensar en toda la historia, cambios y mejoras que han ido resolviendo a lo largo de los años para responder a nuestras necesidades.
Hoy explicamos la historia del proyector de video, uno de los dispositivos tecnológicos más comunes en nuestro día a día, especialmente en el mundo corporativo, las ferias, conferencias y eventos.
Evolución histórica
- Todo empezó en el cine
Sin duda, la industria cinematográfica fue el gran impulsor de este aparato que, hoy en día, utilizamos incluso en nuestras casas o escuelas. Alrededor de 1880, el fotógrafo Eadweard Muybridge inventó el primer proyector (Zoopraxiscope), mediante la proyección de imágenes fotográficas en blanco y negro o de grabados a color desde discos de vidrio que giraban a cierta velocidad para dar la sensación de movimiento – uno de los inicios, también, del mundo de la animación.
Más tarde, los hermanos Lumière, evolucionaron esta tecnología para crear de forma exitosa el primer proyector cinematográfico.
- Las influencias del televisor
Con la invención de la televisión, en los años 1940 y 1950, el proyector experimentó un cambio en su tecnología, en particular el tipo de funcionamiento basado en CRT (Tubos de Rayos Catódicos). En un Proyector a CRT la imagen que se genera es la misma que en un televisor convencional, mediante tres tubos de color rojo, verde y azul respectivamente que, en superposición, generaban una imagen a color (el famoso modelo de color RGB) de forma analógica.
Este tipo de proyectores se utilizó durante muchos años, prácticamente hasta la década de 1990.
- Tecnología LCD y DLP
Con la llegada del nuevo milenio y la fiebre social por seguir evolucionando digitalmente, en el año 2000, se realizó la primera proyección en público de cine digital, con la tecnología DLP desarrollada por la compañía Texas Instruments.
En los proyectores DLP, la imagen se crea a partir de diminutos espejos colocados en un chip semiconductor y en el que cada espejo representa un píxel de la imagen que luego se proyecta. La cantidad de espejos corresponde con la resolución de la imagen. A diferencia de los anteriores, el contraste y la profundidad mejoran notablemente.
En la actualidad, son los más utilizados en el mercado, junto con su principal rival: la tecnología LCD.
Varias tecnologías a nuestra disposición
Gracias a esta evolución, hoy en día podemos elegir entre un amplio número de modelos y tecnologías.
El LCD, por ejemplo, destaca por la naturalidad y buena luminosidad en sus colores, mientras que sus negros no son tan profundos, a diferencia de la tecnología DLP que, a su vez presenta una mayor calidad en la nitidez y contraste.
No existe un proyector perfecto para todo, sino que deberemos encontrar cuál es el mejor proyector según nuestras necesidades.
Si necesitas un proyector para tu próximo evento o conferencia, deja que nuestro equipo de profesionales te asesore para elegir el dispositivo que más se encaja a tu contenido. ¡Hablemos!
