El viernes 19 de abril, la sala oval del MNAC acogió un desfile de moda que señala una nueva etapa creativa de una de las casas emblemáticas en el exigente sector de los vestidos nupciales, Pronovias, coincidiendo con el 60º aniversario de esta marca barcelonesa.
Una marca con unos orígenes situados en la ciudad a principios del siglo XX, incluso antes de que se construyera el Palacio Nacional de Montjuïc, sede desde hace noventa años de este prestigioso museo de arte. El desfile se convirtió en un espectáculo audiovisual con toda una serie de mensajes vinculados a la artesanía de la alta costura y al arte, el arte arquitectónico que ha inspirado los 38 modelos presentados. Un espectáculo para hacer disfrutar a los más de setecientos invitados y también a los miles de espectadores que lo vieron en directo por streaming o que han podido disfrutarlo posteriormente en línea.
Desfile de Pronovias, un espectáculo audiovisual sin precedentes
Un evento audiovisual que tuvo los vestidos de novia como grandes protagonistas, y que logró envolver la disruptiva colección del Atelier de Pronovias con una propuesta totalmente innovadora. Propuesta concebida y materializada a partir de una fructífera e intensa colaboración entre tres empresas referentes en el país: Davideo Events, ShowTex, el estudio creativo Tigrelab y Eikonos.
Vista panorámica del montaje de la escenografía del desfile, con la escultura-pantalla de tela en medio, en la posición que tendría durante la proyección del vídeo. Una escultura de tela como metáfora visual y como pantalla 360º
Una escultura de tela como metáfora visual y como pantalla 360º
El espacio escénico debía mostrar el trabajo artesanal detrás de la confección de una pieza de alta costura, elemento distintivo del Atelier de Pronovias. Pero comunicar este mensaje tan potente debía ser compatible con disponer de un largo pasillo de desfile, catwalk, visualmente limpio, sin ningún obstáculo físico ni siquiera visual: los vestidos y las modelos serían los únicos elementos a mostrar en toda su esplendor, y estas debían moverse continuamente y no detenerse en ningún momento, siguiendo la tendencia de los desfiles de alta costura actuales.
Pruebas de calibración de los cinco proyectores sobre la escultura-pantalla de tela desde la visión que tendría una parte del público.
La solución, concebida por Tigrelab, fue el diseño de una escultura de tela, que como un gigantesco candelabro en medio de la sala oval, bajaría por unos breves minutos desde su techo y sobre ella se proyectaría un vídeo que expresaría, con elegantes imágenes en blanco y negro, tres mensajes clave: el cuidadoso trabajo de las modistas en todo el meticuloso proceso de patronaje, el corte de las piezas de tela y su costura; la identificación de la marca con la ciudad de Barcelona y su rico patrimonio arquitectónico que ha inspirado la colección, y la multiplicidad de las texturas de las telas empleadas en los vestidos nupciales.
Hacer realidad esta propuesta muy innovadora estuvo en manos de ShowTex, que creó una maqueta 1:4, que acabaría indicando la cantidad de tela necesaria para las diversas formas que adoptaría la escultura. La tela triplicaría la medida de la que se vería exteriormente durante la proyección audiovisual. Otro tema decisivo fue elegir el tipo de tejido que garantizaría tener un buen caída, que sería muy conveniente durante el descenso y ascenso del montaje escultórico, y al mismo tiempo ser lo suficientemente opaco para su función de pantalla 360º.
La escultura pantalla
Así, la pantalla, con su volumen corpóreo y su naturaleza textil, se convertía en una metáfora visual de la creación de un vestido. El hecho de emplear una pantalla volumétrica y curvada, no estática durante todo el desfile y que, además, siendo de tela ligera se movía con la misma circulación del aire de aquella amplia sala, transformaba en todo un reto plantearse una proyección 360º. Tenía que ser impecable y sin solapamientos de imagen durante el breve preludio del desfile, justo cuando se apagaban las luces ambientales.
Un reto para el equipo de Eikonos fue optar por el uso de 5 en lugar de 4 proyectores por cada 90º, como sería la solución más habitual, para las imágenes que se verían desde la zona reservada a la prensa gráfica, situada al otro lado del punto de entrada de las modelos al pasillo de desfile. Así, en esta distribución dentro de la sala en forma de estrella de cinco puntas, se calibraron muy cuidadosamente 5 proyectores de 20.000 lúmenes cada uno, que ofrecían una resolución total de 7404 x 1200 px. Una cifra altísima que contó con dos servidores de Watchout para la gestión de los vídeos y los ajustes precisos de geometrías, en una superficie tan compleja como la que hemos descrito antes.
Prueba de proyección sobre la escultura-pantalla de tela, ofreciendo un efecto visual de tejido vaporoso volando rítmicamente.
El resultado? La escultura-pantalla parecía que cobraba vida delante del público asistente y los espectadores conectados al streaming!
Realización en directo del desfile de Pronovias
Y lo que sucedía dentro del MNAC tenía que ser visto y disfrutado en pantalla con un planteamiento audiovisual tan exigente como el propio desfile.
De este tercer reto se encargó Davideo que, con la disposición de 7 cámaras, realizó una transmisión en directo o streaming que transmitió el ritmo del desfile y, al mismo tiempo, ofreció con todo detalle cada uno de los 38 modelos, sus formas en movimiento y las diferentes texturas de las telas de los vestidos, desde transparencias hasta bordados.
Momento de descarga de parte de los materiales instalados por Eikonos, dentro de la misma sala oval del MNAC.
Para poder captar al mismo tiempo el movimiento, el detalle y la composición del desfile, se optó por diversas soluciones técnicas que, además, cumplían una difícil exigencia: que no interfirieran en absoluto la visión de los cientos de invitados. Así, en lugar de la típica grúa se optó por una Tower Cam (telescópica vertical) situada en uno de los extremos. Para la visión desde la posición del público se optó por cámaras PTZ compactas (de control remoto y con zoom) y para ofrecer una espectacular visión desde arriba y en movimiento, se instaló un puente de 12 m en la parte superior de la sala oval, donde una cámara operada a distancia realizó unos espectaculares travellings transversales al eje del pasillo del desfile de Pronovias.
Detalle del ensayo general del desfile, visto desde el control central de la proyección 360º sobre la escultura-pantalla. En la imagen la vemos en la posición elevada que tendría antes y después de la proyección audiovisual.
Como con las proyecciones a la escultura textil, los preparativos de la realización de la transmisión contaron con una dificultad añadida, que es que la sala oval cuenta con luz natural, lo que reduce mucho las horas de ensayo disponibles: todas de noche. Además, la opción escenográfica de iluminar intensamente solo el pasillo central del espacio del desfile requirió un trabajo muy cuidadoso de realización, para que los vestidos se vieran con toda su esplendor siempre, tanto cuando la modelo recorría este pasillo, como cuando iba por los laterales. Y sobre todo cuando en el mismo plano de imagen aparecían simultáneamente modelos situadas en ambos espacios tan diferenciados lumínicamente.
Visión lateral de la sala oval, con la escenografía que rodearía el desfile y la escultura-pantalla situada en la posición elevada que tendría antes y después de la proyección audiovisual.
Las ingentes horas de trabajo artesanal que hay detrás de una colección de alta costura como esta, tuvieron un singular reconocimiento al final del desfile con la aparición del equipo de modistas en el pasillo central, que recibió un merecido aplauso del público. Una emotiva aparición que cerraba el evento de Pronovias con un mensaje muy potente: que detrás de la moda hay personas muy capacitadas, que aman su oficio y que transforman las telas en los vestidos ideados por los diseñadores. Como con la realización del desfile, en el que los grandes profesionales de Eikonos, , ShowTex, Davideo y Tigrelab transformaron la velada en un gran evento audiovisual. Una perfecta alineación entre agencia y partner tecnológico.